Nos empeñamos en que por donde pasemos arrasemos. Queremos tener todo, y que nada nos afecte.
Pero la vida real no es así, no es como una serie de televisión, por que no podemos pretender controlarlo todo. En la vida real no se actúa, la vida se vive. No puedes dar al pausa cada vez que caes, y repetirlo miles de veces hasta que salga bien, por que no va a salir.
No puedes intentar que nada te afecte, por que siendo débiles, se llega a ser un poco mas fuerte.
Y tu afán de querer tener todo, de hacerte notar, trae consecuencias, pero pareces no darte cuenta. Te da lo mismo pasar por encima de alguien, y acabar con ellos, pero lo acabarás pagando.
égoïste
No hay comentarios:
Publicar un comentario