Y el cielo lleno de nubes negras cubre nuestro último adiós.

Nos queda media noche, y yo y tú sonrisa, hacemos un pacto. Esta vez hay que esperar. Pero tengo la certeza de que habrá un nuevo comienzo. Y se que ya no volveré a estar despierta en la madrugada, viendo como tus ojos brillan una vez más. Y aunque las estrellas las veremos, no será igual.